"Si tú vienes, por ejemplo, a las cuatro de la tarde, desde las tres comenzaré a ser feliz. Cuanto más avance la hora, más feliz me sentiré. A las cuatro me sentiré agitada, inquieta; ¡descubriré el precio de la felicidad!. Pero si tú vienes a cualquier hora, nunca sabré a que hora preparar mi corazón…Los ritos son necesarios".

5 de agosto de 2012

Todo y nada de lo que soy.

Soy la perfecta imperfecta.

La racional más irracional.

La que ama sin media, y la que pone freno al amar.

Soy tan grande y tan pequeña,
como la luna llena al menguar.

La que es capaz de brillar cuando todo está oscuro,
y la que se apaga como una estrella fugaz.
Soy la que todo lo sabe,
cuando realmente no sabe nada.
La que todo lo absorbe, y a la que todo se le escapa.
Soy ave de paso que  migra, cuando busca su morada.
La flor que crece con fuerza,
marchitándose en la nada.
Soy lluvia en pleno verano, oasis en un desierto.
Soy todo lo que te digo...
y nada de lo que cuento.

(Madgalena Barreto)