"Si tú vienes, por ejemplo, a las cuatro de la tarde, desde las tres comenzaré a ser feliz. Cuanto más avance la hora, más feliz me sentiré. A las cuatro me sentiré agitada, inquieta; ¡descubriré el precio de la felicidad!. Pero si tú vienes a cualquier hora, nunca sabré a que hora preparar mi corazón…Los ritos son necesarios".

11 de marzo de 2012

Tiana y el Sapo

-Queréis ser humanos, pero estáis ciegos, no véis lo que necesitáis.
-Qué queremos, qué necesitamos... es lo mismo ¿no? 

No hay comentarios:

Publicar un comentario